Estoy trabajando con un horario estupendo y, de la noche a la mañana, me lo cambian.
O doblo turnos y no puedo organizarme para sacar a mi perro. O me voy de fin de semana, y nadie puede cuidar de mi gato.
O estás en paro, sin problemas para sacar a tu perro y tienes la suerte de que te ofrecen un trabajo con un horario incompatible con las necesidades de tu mejor amigo. No lo puedes rechazar.
¿Qué hago ahora?
Todos recurrimos a quienes tenemos cerca. Familia, amigos y vecinos siempre nos pueden echar un cable en un momento puntual, pero cuando estamos hablando del día a día es más complicado para nosotros e injusto para nuestra mascota…
Pero no te preocupes, hay solución para casi todo, por lo menos para este problema ya existe y está disponible para los perros y gatos de nuestro barrio (Parque de Lisboa y alrededores).
Estoy hablando de unos paseadores caninos, ya lo habías adivinado ¿no?
Conocemos a unos de total confianza para nuestros clientes, tanto para el paseo diario del mediodía, que es lo más habitual necesitar si volvemos a casa tarde; como para ese viaje de trabajo de un par de días que te han avisado sin tiempo para organizarte, o un fin de semana en pareja en un alojamiento que no admiten perros, o la boda a la que va toda la familia…y no tienes a quién dejar el perro.
Y las residencias caninas ¿qué tal están?
Para estancias más prolongadas es más fácil llevarlos a una residencia canina. Nosotros conocemos Malilupus, donde le van a tratar de maravilla y está muy cerquita de Alcorcón. Para ello es importante acostumbrarles desde cachorros para que lo conozcan y no sea un trauma cuando surja la necesidad.

Aspecto de parte de los alojamientos.
¿Cuándo y cómo se hace esto?
Muy fácil. Es bueno que el perro esté acostumbrado desde cachorro a ir a la residencia canina, eso nos dará mayor libertad a nosotros, si acostumbramos al perro desde pequeño lo verá algo natural adaptándose rápidamente. La primera vez sería más aconsejable una estancia larga que corta, ya que así le dará tiempo a entender las rutinas de la nueva situación, si lo dejamos un par de días no le habrá dado tiempo a entender las nuevas costumbres y no le quedará una sensación agradable ya que el periodo de adaptación habrá sido breve.
Si optamos por una estancia algo más prolongada, al recoger a nuestro perro, podremos ver en su comportamiento si nos recibe con una aptitud de alegría o de desánimo, esa será nuestra mejor respuesta para comprobar cómo ha estado. Si la sensación ha sido satisfactoria, al volver el perro a la residencia lo hará contento y alegre.
Lo que os podemos decir es que en Malilupus las experiencias siempre han sido satisfactorias.

También disponen de algunos alojamientos con calefacción para quien así lo desee
Pero si prefieres que esté en casa la solución del paseador/asistente es perfecta.
Más aún si tu mascota es un gato.
También hay residencias para gatos, pero la mayoría de los gatos no llevan bien estar fuera de su casa. Se estresan bastante, comen poco o dejan de comer, y es posible que puedan pasarlo mal. Y tú peor cuando te enteres al recogerlo. Ahí es donde entran en juego los paseadores/asistentes de mascotas. Ellos van, con la frecuencia que les indiques, a tu casa, les ponen de comer y beber, limpian el arenero y juegan un rato con ellos. Incluso les dan su medicación si tienen alguna enfermedad crónica.
Sí, ya lo sé, quieres que te de su teléfono…para eso, tendrás que venir a la clínica y te daremos sus datos con mucho gusto.