Pulp fiction. Así se podría llamar la jornada de hoy.
Las previsiones eran pésimas, daban lluvia sí o sí a partir de las 12 h, así que teníamos que salir pronto. Y así lo hicimos, dejamos todo preparado la víspera y empezamos a caminar hasta encontrar un bar para el desayuno. Cuando estábamos casi terminando de almorzar empezamos a charlar con una familia catalana encantadora que tenían el siguiente plan: Artur y Pau caminaban media etapa, y Joan y Susana les hacían el relevo con el coche. Es una opción, andas la mitad y tardas menos.
Pero como nosotros lo hacemos a la manera tradicional, nos despedimos y nos pusimos en marcha mirando el nublado cielo. Amenazante, pero sin descargar, nos respetó hasta las 12 h, y entonces sí que empezó a llover.
Por suerte ya estábamos en Melide, que era una parada prevista para comer pulpo en Casa Ezequiel, de ahí lo de Pulp Fiction :-). Nos lo habían recomendado una hora antes 2 chicas catalanas en otro alto en el camino. Y mereció la pena.
Además de evitar el chaparron -cuando salimos ya había dejado de llover- el pulpo estaba tiernisimo y la empanada deliciosa. Cómo vamos a echar de menos Galicia…no puedes dejar de ir si pasas por Melide.
Después, volvió a salir el sol hasta llegar al Pazo de Sedor, un precioso lugar en el que hemos disfrutado de un baño en la piscina antes de la tradicional siesta.
Ya sólo quedan 2 días de camino…